Aunque nos parezca sorprendente la Comunicación (sobre todo la de alto nivel) tiene que ver con un término esquivo: Purificación.
Podríamos reencuadrar ésta como aquella comunicación verbal y no verbal que tiene un Propósito y éste a su vez indica un mensaje claro y una responsabilidad.
Por eso cuando escuchamos esas capacidades tan mencionadas como la Escucha Activa, pasamos por alto que para que así sea debemos escuchar con el oído interno, es decir nuestra propia voz interior que trata de expresarse a través de nosotros mismos hacia el exterior en forma de servicio en forma de mensaje que conlleva acción y propósito.
De no ser así y haciendo oídos sordos a nuestra emisora interna, la creatividad como forma de autoexpresión y el discurso que parlotearemos no será activamente escuchado por aquellos que nos rodean y a la postre generaremos confusión o una torre de babel.
Así que meditemos en esa Purificación con responsabilidad y para aquellos que sientan estas palabras quizás se interesen por otro término muy muy recomendable: Vishudda… ¡pero eso es otra historia!